BOLETIN IATROS, ABRIL
2016.
CIRCULO DE CIBERLECTURA
INDICE.-
Noticias.- II JORNADAS MOISES BROGGI/ I CONGRESO DE FILOSOFÍA DE LA SALUD PÚBLICA / CORE CURRICULUM
Comentario de libros.- Roman
Jakobson. El marco del lenguaje. Editorial: Fondo de Cultura Económica. México. Reimpresión 1996
Webs de interés.- Revista folklore
Artículo comentado.- Homeopatía y la lista de la
vergüenza…. ¿final del viaje?.-
Video recomendado.- El color de la piel.
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Noticias.-
II JORNADAS MOISÉS BROGGI:
Trastornos del aprendizaje. Dia 26 de Mayo, de las 17 a las 21 horas, Auditorio
de la UPF, C/ Balmes 132, Barcelona. Organiza: fundación Letamendi-Forns. Conferencias
de Artigas-Pallares (trastornos del neurodesarrollo) y Luz Tello (Dislexia). Un
espacio para compartir los profesionales de pediatría y maestros y profesores. VER PROGRAMA PROVISIONAL AQUI
INSCRIPCION GRATUITA AQUI
I CONGRESO DE FILOSOFÍA DE LA
SALUD PÚBLICA 5,6,7 Mayo. Facultad de Filosofía, Universidad Autonoma de
Barcelona.
VER PROGRAMA
COMPLETO AQUI
CORE CURRICULUM EN COMUNICACIÓN
PARA IBEROAMERICA ESPAÑA Y PORTUGAL
Estimados compañeros y amigos, Me es grato anunciaros que ya está disponible
la publicación sobre el Core Curriculum en Comunicación para Iberoamerica
España y Portugal
Un saludo cordial. Roger Ruiz.
Comentario de libros.-
Roman Jakobson. El marco
del lenguaje. Editorial: Fondo de Cultura
Económica. México. Reimpresión 1996.
Roman Jakobson |
A lo largo de las páginas del libro Roman Jakobson va analizando la
lingüística y la semiología en un contexto histórico afirmando que estos temas
han sido tratados por diferentes pensadores a lo largo de la historia. Gran
influencia, siempre según el autor, tuvo John Locke quien dedica, a las
palabras concebidas como “los grandes instrumentos de la cognición” a su uso y
a su relación con las ideas, el tercer libro de su Essay Concerning Humane Understanding
(1694). También trabajó el problema de los signos denominando a este estudio
como “Doctrina de los signos” de los cuales los más usuales son las palabras.
“Para comunicar nuestros pensamientos para nuestro propio
uso son también necesarios signos de nuestras ideas. Los que el hombre ha
encontrado más convenientes, y por consiguiente utiliza más generalmente son
los sonidos articulados”.
También Lambert en su trabajo Neues
Organon indaga en la necesidad de la
cognición simbólica en general y del lenguaje en particular dado que esa
cognición simbólica “es para nosotros un anexo indispensable del lenguaje”.
Bernard Bolzano da un paso más en el campo de la semiótica con una nueva
definición del signo: “Un objeto… a través de cuya concepción deseamos conocer
de manera renovada otra concepción conectada con aquélla en un ser pensante es
lo que llamamos un signo”. Bolzano diferencia entre el significado de un signo como tal y el sentido que ese signo adquiere en el contexto de la circunstancia
presente y diferencia entre el signo producido por el emisor y percibido por el
receptor que estará siempre entre la comprensión y la incomprensión.
Pero el autor se centra en la figura de Charles Sanders Peirce (1839-1914)
a quien otorga la paternidad de la moderna semiótica. Para Peirce la semiótica
abarca toda la multiplicidad de fenómenos significativos, desde la llamada a
una puerta, la huella de un pie, un grito espontáneo o una meditación
silenciosa, por poner sólo algunos ejemplos. Peirce introduce los términos interpretador e interpretante: el primero designa al receptor y descodificador de
un mensaje, mientras que el segundo se refiere a la clave que utiliza el
receptor para entender el mensaje que recibe. Para Peirce toda
significación no es sino la “traducción
de un signo a otro sistema de signos”, ahora bien, todo signo tiene la capacidad de ser
traducible en una serie infinita de otros signos que bajo ciertos aspectos, son
siempre mutuamente equivalentes. Para Peirce el signo no exige nada más que la
posibilidad de ser interpretado incluso en ausencia de un emisor. Por ejemplo,
los síntomas de enfermedad, según esta teoría, son también considerados como
signos que requieren de un intérprete. La semiología médica estaría muy cercana
a la semiótica entendida como ciencia de los signos. Peirce está de acuerdo con
Saussure en que la lengua no es sino un caso particular de la Teoría de los
Signos “el signo no empieza a conocerse de veras sino cuando hemos visto que no
es sólo una cosa transmisible, sino que por su naturaleza misma es una cosa
destinada a transmitirse” y que por tanto, en términos de Peirce, exige la
participación de un interprete.
Peirce, siguiendo la tradición estoica que concibe el signo como una
referencia por parte del signans al signatum, establece una tricotomía de
los modos semióticos y les denomina indicio, icono y símbolo. El indicio es una
referencia del signans al signatum por virtud de una contigüidad efectiva, el icono es una
referencia del signans al signatum por virtud de una similaridad
efectiva y el símbolo es una referencia del signans
al signatum por virtud de una
contigüidad “imputada”, convencional, habitual. Además “el icono tiene la clase
de ser que pertenece a la experiencia pasada, el indicio tiene el ser de la experiencia
presente y el símbolo es esse in futuro”,
el ser del símbolo consiste en que algo se experimentará si se satisfacen
ciertas condiciones. El valor del icono consiste en su exhibir los rasgos de un
estado de cosas considerado como si fuera puramente imaginario, el valor de un
indicio es que nos asegura de un hecho positivo, el valor de un símbolo es que
sirve para hacer racionales el pensamiento y la conducta y nos permite predecir
el futuro.
Charles Peirce |
En la semiótica de Peirce se subraya
no sólo la primacía de la relación simbólica entre el signans y el signatum de los datos lingüísticos, sino al mismo
tiempo la copresencia de la relación icónica e indicial. Peirce da una simple
pero brillante definición del significado: “la traducción de un signo en otro
sistema de signos”.
Si en el modelo tradicional de la lengua, tal como fue explicado por Karl
Bühler, había tres funciones claramente diferenciadas (emotiva, conativa y
referencial) correspondientes al emisor, receptor y a una “tercera persona” o
más propiamente dicho, a algo o alguien de que se habla, en el modelo de
Jakobson aparecen seis funciones en toda comunicación. Se mantiene la función
emotiva (emisor) y conativa (receptor), pero se introducen otras funciones; la
fáctica: está orientada hacia el contacto, el propósito es iniciar y mantener
una conversación y se despliega mediante multitud de fórmulas ritualizadas.
Ej.: Bueno (dijo ella). Bueno, aquí estamos (dijo él). Aquí estamos (dijo
ella), ¿no es cierto? Eso digo yo (dijo él) ¡pues sí aquí estamos! Etc. Para
Jakobson el enfoque hacia el mensaje como tal, que se centra en el propio
mensaje por sí mismo, corresponde a la función poética del lenguaje. También
toda comunicación tiene la función del metalenguaje, es necesario distinguir
entre dos niveles de lenguaje; a saber, el “lenguaje objeto” que habla de
cuestiones ajenas al propio lenguaje, y por otra parte el lenguaje que habla
del código verbal mismo, a este lenguaje se le denomina metaleguaje. Cada vez
que emisor y/o receptor necesitan verificar si utilizan el mismo código, el
discurso se centra en el código y
efectúa una función metalingüística. Según el autor “el recurso constante a la
metalengua es indispensable tanto para la asimilación creadora de la lengua materna
como para su final dominio… Cada vez vemos más claramente que todo mensaje
verbal, en una selección y combinación de sus constituyentes, implica un
recurso al código dado, y que en ese perpetuo marco de referencia subyace un
conjunto de operaciones metalingüísticas latentes”. Finalmente, la función
referencial en Karl Bühler, en Jakobson obedece al contexto en el sentido
amplio de la palabra, verbal y no verbal, a todo aquello que ayudará a
encontrar el significado.
En el ensayo titulado “Sobre las perturbaciones afásicas desde el punto de
vista lingüístico” el autor mantiene que
la afasia es ante todo una desintegración de la lengua, y puesto que los
lingüistas se ocupan de la lengua deben ser ellos quienes nos informen sobre la
naturaleza exacta de esas diferentes desintegraciones. Así va analizando las
diferentes tipos de afasia y hace referencia a los hallazgos topográficos
descubiertos por expertos de la corteza cerebral y su correspondencia con los
niveles de desintegración afásica de la lengua. Especifica que “la conclusión
central que podemos sacar es la necesidad de una cooperación cada vez más
estrecha entre lingüistas y neurólogos”.
El libro termina con el ensayo
“Sobre el enfoque lingüístico del problema de la conciencia y el
inconsciente”. El ensayo trata de verificar hasta qué punto la lengua es
producto de la actividad consciente del hombre o si por el contrario la
conciencia y la voluntad humana ejercen sólo una pequeña influencia en el
desarrollo del lenguaje. En el ensayo están presentes y analizadas las dos
versiones, para quienes “los patrones inconscientes cubren todo el campo de los
rasgos del habla” y para quienes a través de la función metalingüística del
lenguaje permiten asegurar una comunicación plena y precisa entre los
hablantes. “La competencia metalingüística desde los dos años de edad convierte
al niño en un crítico y corrector del habla de la gente que lo rodea”.
Juan Carlos Hernández Clemente.
Madrid, 2016.
Webs de interés.-
Joaquin Diaz |
Si miramos los
artículos encontramos una gran variedad de temas: estudios sobre los refranes,
rituales y costumbres en diferentes partes del mundo, estudios sobre
manifestaciones religiosas y artísticas, estudios de cariz histórico.... Más de
2.500 artículos y más de 650 colaboradores al alcance
del erudito, sí, pero también del curioso o de quien prepara un viaje, o
profundiza sobre un tema etnográfico.
Está indexada en Dialnet, lo que
asegura la difusión de sus trabajos.
Como muestra escogemos: La influencia
de las emociones en el sonido de la voz
CABRELLES
SAGREDO, Mª Soledad. O bien: LO EROTICO Y LO OBSCENO EN LA TRADICION ORAL MARTIN
CRIADO, Arturo
De esta última
publicación extraemos el siguiente párrafo:
“Además, se puede decir que, lo mismo que hay especialistas populares,
de acuerdo con la conocida teoría de Joaquín Díaz, que componen y cantan
romances, también hay verdaderos especialistas en este tipo de cantares y
refranes; son hombres, por lo general, que tienen fama de chistosos y un poco
desvergonzados, y que poseen un repertorio “colorado” más variado y abundante
que la mayoría de las personas”.
Podéis acceder a
estos artículos copiando los títulos en el buscador.
Artículo
comentado.-
Homeopatía y la lista de
la vergüenza…. ¿final del viaje?.-
Hahneamn |
Quizás en esta historia queda por determinar las motivaciones del Rector de
la UB, el Excmo Doctor Didac Ramírez, cuando decidió de un plumazo acabar con
dicho máster. La pregunta clave sería.... ¿fué por valor, por coherencia
científica… o por o vergüenza? ¿Valor de arrostrar una pérdida económica, (en
el conjunto del negocio de IL3 posiblemente exigua), o miedo a figurar en la llamada “lista de la vergüenza?
Pero… ¿tanto tiene que temer toda una
Universidad a una lista que está en el mundo virtual? Probablemente sea éste un
indicador de la fuerza de las redes sociales sobre la economía real… Figurar en
esta lista puede condicionar la decisión
de futuros graduados, quizás incluso puede condicionar el liderazgo de la UB como campo de
excelencia… No, hoy en día no puede soslayarse el poder de las redes sociales
y, sobre todo, cuando estas redes “marcan tendencia”…
Desde el Paleolítico la gran medicina de la Humanidad ha sido el placebo.
Cuando Hahneman postuló la inverosímil teoría de que el agua en contacto con
todo tipo de materiales, retenía de ellos un poder curativo, y que este poder
curativo se podía potenciar sacudiéndola enérgicamente y volviéndola a diluir en cantidades aún más infinitesimales ,
proporcionaba al ciudadano del siglo XVIII un tratamiento que "al menos no
hacía daño" .... Todo un avance si consideramos las lavativas y las
sangrías de la época ... Pero ha sido muy curioso que esta práctica haya
logrado sobrevivir hasta llegar al siglo XXI.
El tema clave es el siguiente: ¿cómo ha sido posible que la homeopatía,
asentada sobre un modelo tan caduco (miasmas, energías que nadie sabe definir,
diluciones que dejan marcas en el agua que nadie encuentra, sucusiones que
transforman las cualidades del agua ....), como ha sido posible que llegara
hasta el siglo XXI como una disciplina médica amparada por los colegios profesionales?
Se me ocurren varias razones:
1.-La más obvia: un interés económico de los elaboradores y
comercializadores, que sin I + D ni necesidad de demostrar resultados en salud,
pueden colocar en las farmacias productos caros y de alto retorno económico. Y
las farmacias deseosas de poder llegar a fin de mes, han hecho una publicidad
gratuita. Lo cierto es que vas a comprar un analgésico y muchas veces el
farmacéutico te dice: "y por qué no prueba primero un remedio
homeopático?" No dudo que bastantes farmacéuticos son escépticos de la
homeopatía, pero… ¿a quién amarga un dulce?
2.-Los mismos médicos hemos dado cobertura a una práctica en la que no
creemos. Lo hemos hecho porque "ya
que hay mercado, al menos que sean médicos que lleven el negocio, pues sabrán
distinguir lo grave de lo que no lo es". Cierto, es un buen argumento,
pero digamos que es un argumento caduco.
Ahora hay pocas dudas sobre el carácter mágico de la homeopatía…. Si
hace 30 años era admisible pensar que "quizás funciona, vamos a esperar los ensayos a doble ciego", estos ensayos
hablan con la elocuencia del placebo: "no hay ninguna meta-análisis que
aporte fundamento a la terapia homeopática ". En este nuevo escenario las universidades y los colegios de médicos deben ser garantes de los valores de
transparencia y lealtad con la sociedad. No podemos tratar de manera diferente
un fármaco ineficaz alopático que un
fármaco ineficaz homeopático.
Lista de la vergüenza en México |
Llega el turno por consiguiente a Colegios de Médicos y Ministerio de
Sanidad. A los primeros les diría que deberían iniciar sin demora un proceso de
reflexión, sobre todo a los que amparan secciones colegiales homeopáticas. Y al
Ministerio de Sanidad una propuesta asaz
sencilla: todas las pócimas (que no medicamentos) homeopáticas no deberían
exceder el precio de 3 euros, y advertir
que son placebos. Así de simple. ¿Qué
menos a una industria que no tiene I+D ni supera criterios mínimos de eficacia? Porque la otra
alternativa, prohibirlos, daría pie a un mercadeo incontrolable… Quien
quiera comprar placebo está en su derecho, pero tiene que saber que compra
placebo, y las autoridades deben garantizar un precio máximo en ningún caso
abusivo.
Francesc Borrell
Barcelona
Vídeo recomendado.-
Skin color is an illusion
Nina Jablonski
parte de una constatación: Darwin no atinó a relacionar el color de la piel con
la insolación de los territorios por los que navegaba el Beagle. Pero si hubiera podido tener acceso a un
satélite de la NASA especializado en radiación solar, y hubiera superpuesto el
grado de melanina de los habitantes de estos territorios, habría constatado una
casi absoluta correspondencia. Ello plantea retos de salud importante a la
enorme masa de personas desplazadas en razón de nuestra Historia reciente
(varios milenios). Nosotros mismos, españoles herederos de la piel blanca de
los godos, tenemos desprotección ante los cánceres de piel. Pero la gente de
color desplazada a regiones de baja insolación tienen osteoporosis y otras
enfermedades que han sido tradicionalmente subvaloradas. Como postula
Jablonski: el color de nuestra piel es la muestra mas clara de la evolución de
las especies en cada uno de nosotros, y de la capacidad adaptativa de la vida.
La Redacción