CIRCULO DE
CIBERLECTURA
INDICE.-
Noticias.- XXV CONGRESO DE ENTREVISTA CLINICA Y COMUNICACION ASISTENCIA
Comentario de libros.- Patologías de la razón. Historia y actualidad de la
Teoría Crítica.Autor: Axel Honneth. Platt FW. Conversation repair. Little, Brown and Company Boston 1995.
Webs de interés.- Steinhof: La lucha
contra los “inferiores”: Historia de la medicina nazi en Viena
Artículo comentado.- Optimistas a pesar de todo.
Video recomendado.- El autismo en el foco de atención.
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Noticias.-
XXV CONGRESO DE ENTREVISTA CLINICA Y COMUNICACION ASISTENCIAL
6-8 Noviembre, cAsa Convalescencia, Barcelona
Información e inscripciones:
http://semfyc.eventszone.net/eclinica2014/
6-8 Noviembre, cAsa Convalescencia, Barcelona
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Comentario de
libros.-
Patologías de la razón. Historia y actualidad de la
Teoría Crítica.
Autor: Axel Honneth
Editorial: Katz Editores, 2009.
Los seres humanos buscamos sentido a nuestras
vidas. Somos seres de sentido, y si me apuran, sentido que pueda razonarse. En
este libro Axel Honneth trata de demostrarnos la actualidad de los autores de
la Escuela de Frankfurt, en la búsqueda de sentido a nuestras vidas. Fueron
autores dispares en métodos y objetivos,
pero coinciden en una idea troncal: que las patologías sociales, expresadas en la
manera de vivir de sus ciudadanos, se deben a la pérdida del ideal hegeliano.
¿A cual ideal hegeliano se refieren? Al
concepto de que siempre es necesario un
universal racional –una idea compartida de qué tipo de sociedad deseamos-, que
posibilite una autorrealización plena de los sujetos dentro de una sociedad.
Las desviaciones de dicho ideal de autorrealización pueden describirse como
patologías sociales… ¿Por qué?... porque van acompañadas de “una pérdida
dolorosa de oportunidades de autorrealización intersubjetiva”.
Axel Honneth |
Para estos autores de la Escuela de Frankfurt,
además, las deformaciones patológica propias del capitalismo sólo pueden
superarse si los implicados inician un proceso de ilustración, es decir, a
través de la educación. En el fondo reeditan la idea de una sociedad ilustrada…
Pero este esfuerzo educativo tiene que estar amparado por instituciones que
permitan a los individuos proyectar su vida hacia metas y objetivos reconocidos
socialmente permitiendo así encontrar un sentido a su existencia. Nuestras vidas ganan sentido mediante este
proceso de ilustración, educación…
¿Y qué ocurre si esta ilustración no sucede? “Todo
aquel que no permita que esos fines racionales objetivos determinen su vida,
sufrirá en cambio, las consecuencias de la “indeterminación” y desarrollará
síntomas de desorientación”. Aparecen nuevamente ideas de Hegel, quien estaba
convencido de que las patologías sociales deben entenderse como resultado de la
incapacidad de la sociedad de expresar adecuadamente sus inquietudes e ideales en
las instituciones, las prácticas y las rutinas cotidianas. Todos los actos de
los individuos, incluidas las rutinas, vendrían impregnadas de racionalidad, entendida ésta,
como autorrealización individual dentro de una sociedad.
El autor nos expone de modo sintético por qué
caminos cada uno de los autores de la Teoría Crítica trata de encontrar el
ideal de autorrealización, así como, las formas de evitar las patologías
sociales. El propio Axel Honneth hace su propuesta estableciendo tres modelos diferentes de
crítica de la sociedad que los denomina con los conceptos: construcción,
reconstrucción y genealogía.
Construcción.- Los enfoques constructivos tratan de
servirse de un método de justificación susceptible de aprobación general para
llegar a principios normativos a la luz de los cuales se pueda criticar
fundadamente el orden institucional de una sociedad; del consenso a las normas.
Reconstruccion.-En los enfoques reconstructivos se
hace el intento de poner al descubierto en las instituciones y en las prácticas
de la propia realidad social ideales normativos que puedan resultar adecuados
para criticar la realidad existente. De la realidad cotidiana, lo aceptado por
todos, a las normas.
Genealógicos.- Y en los enfoques genealógicos se
critica la realidad social demostrando cómo sus ideales normativos se
convierten forzosamente en prácticas que estabilizan el dominio (quizá por un
desplazamiento de su significado original hasta hacerse irreconocible). Lo que
ha funcionado deviene norma.
El autor también se hace eco de la importancia que
tuvo el pensamiento freudiano y el psicoanálisis prácticamente en todo el siglo
XX y muy concretamente en la primera mitad del mismo y lo relaciona con la
patología social que está desvelando en este libro (hasta ahora desde el punto de vista
puramente sociológico). Distanciándose de la mayoría de las propuestas
freudianas el autor sí se queda irrevocablemente con una que describe así: “el
haber comprendido que el ser humano en
principio siempre es un ser escindido, desgarrado, pero que gracias a su
interés intrínseco por ampliar su libertad “interior” posee la capacidad de
reducir e incluso de superar ese desgarramiento mediante la actividad propia,
reflexiva […] Freud añade a la imagen tradicional del ser humano una idea
esencialmente nueva, cuyo núcleo respectivo constituye una ampliación del
concepto de la relación del ser humano consigo mismo: el sujeto solo tiene
acceso a sus actividades psíquicas desde la perspectiva interior de una
representación de su propia libertad que ya le es familiar, que directamente le
obliga a volver retrospectivamente sobre los momentos aislados de su propia
biografía para apropiarse finalmente, a posteriori y por el camino del
recuerdo, de lo aislado. Sólo presuponiendo una apropiación crítica del propio
proceso de formación, se podría decir también, que el ser humano conquista la
oportunidad que se le ofrece de la libre voluntad”.
Hegel |
El autor, finalmente, analiza a algunos autores
seguidores de la originaria escuela de Frankfurt como Franz Neumann y Albrech Wellmer, así como a Alexander
Mitscherlich, médico y psicólogo alemán muy unido a la antropología médica en
la cual le introdujo su maestro Victor von Weizsäcker.
De Neumann destaca el artículo Angustia y política y como este autor observa que el “miedo” es el
mayor obstáculo desde el punto de vista intrapsíquico para cualquier forma
política democrática porque impide que los sujetos alcancen y ejerciten las
capacidades que son irrenunciables para formar una voluntad común, para este
autor “los miedos masivos intensificados
neuróticamente como una especie de patología social que puede intervenir
profundamente en la capacidad individual de participar en la formación
democrática de la voluntad: para poder formarse una opinión con autonomía y
poder articularla públicamente se necesita estar libre de angustias que
menoscaben el sentimiento de autoestima, restringen la capacidad de
deliberación y por eso hacen recurrir a todos los sustitutos ajenos al yo”.
Marcuse |
Finalmente Wellmer se une a la corriente filosófica
denominada giro lingüístico, paso paradigmático de la filosofía de la
conciencia a la filosofía del lenguaje y trata de contrarrestar la ortodoxia
marxista demostrando que con ayuda del análisis del lenguaje “el potencial de
la razón liberadora en el que podemos poner las esperanzas de emancipación no
se basa en los procesos de trabajo de la
sociedad sino en la estructura de la intersubjetividad lingüística”
Juan Carlos Hernández Clemente.
Madrid.
Platt FW. Conversation repair.
Little, Brown and Company Boston 1995.
En el Boletin Iatros de abril prestábamos atención a la obra poética de Frederic
W Platt y mencionábamos algunos de sus libros. Algunos lectores nos han
solicitado una reseña de estos libros, muy en la línea de la ahora llamada
“medicina narrativa”. En efecto, Frederic Platt es conocido sobre todo por el
libro que hoy comentamos, (puede adquirirse por Internet a un módico precio).
El libro desarrolla 53 interacciones médico-paciente agrupadas en 7 secciones y
un epílogo. Cada sección se inicia con una exposición algo más teórica que
sirve de marco para los comentarios mas concretos.
Prestemos atención a la primera de estas secciones: “descubriendo el
significado”. Descubrir el significado
de lo hablado, de la demanda del paciente, en ocasiones de los síntomas mas
allá de su expresividad semiológica. El paciente, nos dice Platt, quieren saber
el “por qué” de su dolencia y suelen establecer relaciones causales que
introducen en los diálogos:
-Dr.- ¿Desde cuando tiene este dolor?
-P.- Desde que me trasladé a Denver.
¿Tiene este traslado a Denver un
significado especial para el paciente? “Si sabemos de donde viene el paciente
(en sentido figurado), estaremos en
mejor disposición de saber hacia donde quiere ir”, nos dice F.Platt. Pero… ¿qué
necesitamos saber del paciente? He aquí algunas ideas del autor, (cito literal
de la pág 3):
-¿Qué tipo de persona es nuestro paciente, una persona de pocas palabras
que lleva su sufrimiento de manera silenciosa, o una que fácilmente y a la
primera de cambio busca ayuda?
-¿Cuáles son las cosas importantes que construyen el mundo del paciente: la
gente, el trabajo, cuáles son sus mayores intereses y preocupaciones? ¿Y en el
pasado? ¿Cuáles son sus principales motivos de ilusión y preocupación?
-¿Qué aspectos del pasado influencian la manera actual de ver el presente?
-¿Qué efectos tiene la enfermedad actual sobre la vida del paciente, (en su
trabajo, relaciones interpersonales, esperanzas de futuro, auto- definición)?
-¿Qué piensa el paciente que ha causado la enfermedad? ¿Le ha generado
algún tipo de responsabilidad o culpa?
-¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad? Cuáles son los parámetros de la
misma, (el cuándo, dónde, cómo de malo, que empeora o mejora, síntomas
asociados etc.).
-¿Qué le han dicho otras personas de su enfermedad? ¿Qué otros
diagnósticos, etiologías, o consideraciones terapéuticas maneja?
-¿Qué esperanzas tiene el paciente en relación a la ayuda que le estamos
prestando? ¿Qué espera de nosotros? ¿Tiene otras preocupaciones al respecto?
En esta primera parte Fred Platt nos ofrece 6 casos a estudio de los que
rescato para nuestros lectores el caso número 3. Se trata de una paciente de 84
años que ingresa por insuficiencia cardíaca y en el curso de la hospitalización
desarrolla una taquiarritmia y un infarto de cara diafragmática. De todas
maneras el tratamiento es efectivo y los parámetros biológicos mejoran en los
siguientes 7 días, pese a lo cual la enfermera nos advierte de un brusco cambio
conductual: “no quiere comer y no quiere abrir los ojos”. Se produce el
siguiente diálogo que resumo:
Dr.-Selma parece que no le guste el desayuno…
(silencio)
Dr.- Selma, ¿sabe quién soy yo?
P.-Desde luego, es usted mi doctor, el Dr X.
Dr.- Si, ¿y por qué tiene usted los
ojos cerrados? ¿Los puede abrir?
(silencio)
Dr.-¿Qué le sucede?
(largo silencio)
P.-el Padre R vino y me dio la extremaunción.
Dr.- Ah ¿si?
(silencio)
Dr.- Selma, ¿cree que va a morir?
(Pausa)
P.- Si…
Dr.- Ya veo… (Pausa) Sin embargo no veo el motivo de que mantenga los ojos
cerrados.
(silencio)
P.-No quiero mirar.
Dr.-¿No quiere mirar?
P.-No quiero ver lo que va a suceder.
Dr.-No quiere ver como usted se muere…
P.-Eso…
Dr.-Ya veo. Así que usted recibió la extremaunción, y ahora piensa que va a
morir y cierra los ojos para no presenciarlo…
P.-Si, (abriendo los ojos y mirando fijamente al médico).
Dr.-En realidad no creo para nada que vaya usted a morir. Espero que eso no
la disguste.
P.- No… ¿qué hay para comer?
El caso puede adjetivarse de curioso, o asombroso, (amazing es el adjetivo que Fred nos propone). Sin embargo recuerdo
una paciente mía que un buen día cerró sus ojos y se negó a hablar. También
había recibido la visita de un sacerdote y posiblemente la extremaunción, (eso
no lo recuerdo con precisión). Yo no fui tan afortunado como Fred y no conseguí
que articulara una sola palabra. Había una diferencia notable con el caso que
relata Platt, en mi caso se trataba de una paciente terminal y ella lo sabía.
Así acabó sus días la pobre señora… quizás sin el alivio de un médico que con
mayor acierto la supiera “desencallar” del auto-impuesto silencio, como sí supo
hacer el Dr. Platt.
El libro que comentamos tiene por consiguiente estas resonancias para el
clínico avezado, pero sin duda será un acicate para el primerizo. En el mejor
estilo narrativo, sea dicho de paso, y con una idea central: cualquier
conversación con el paciente es susceptible de ser reparada, mejorada, por mal
que nos haya funcionado en una primera instancia. Si tan solo pudiéramos
retener esta idea ya habríamos sacado partido a la lectura de este libro.
Francesc Borrell
Sant Pere de Ribes, Barcelona.
Webs de
interés.-
Steinhof: La
lucha contra los “inferiores”: Historia de la medicina nazi en Viena
plano de Steinhof |
El Hospital Steinhof de Viena, saludado con motivo de su inauguración
(1907) como innovador, puntero y destacado, se convertiría tras la anexión
(Anschluss) de 1938 en un centro de exterminio acorde con las ideas
nacionalsocialistas.
Entre 1940 y 1945 existió una sección infantil, ubicada en dos pabellones y
denominada “Am Spiegelgrund”, en la
que murieron unos 800 niños enfermos o con discapacidades, inicialmente
mediante la aplicación de procedimientos de eutanasia activa. Hasta 1980 se
conservaron en el hospital preparaciones de cerebros y muestras
anatomopatológicas de algunas de las víctimas.
Por otra parte, el hospital “colaboró” entre 1939 y 1941 en la la Aktion
T4, un programa, llamado de eutanasia, precedido por una política de
esterilización de enfermos mentales en los años precedentes. El Aktion T4 fue
creado y llevado a la práctica ejecutado bajo la responsabilidad de médicos y
enfermeras para eliminar enfermos incurables, niños con taras hereditarias o
adultos improductivos. Se calcula que fueron asesinadas de forma sistemática y
planificada hasta más de 200.000 personas, si bien fuentes más conservadoras
establecen un total de 70.273 víctimas. El nombre T4 se debe a la dirección de
los cuarteles generales de la organización que ejecutaba estos planes, en la
Tiergartenstraße 4 de Berlín. El programa se realizó en seis centros situados
en Alemania y en la Austria. En concreto, el centro austriaco se ubicaba
en el castillo de Hartheim, próximo a Linz, donde fueron asesinados 3200
pacientes de Steinhoff. La colaboración entusiasta de la Medicina y la
Psiquiatría de la época con este ignominioso “programa” hizo que algunos de los
perpetradores del Aktion T4 terminasen participando activamente en la “Solución
Final”. Un caso bien conocido es el del psiquiatra Eberl, que tras mostrar sus
“habilidades” en el exterminio de pacientes llegaría a ser director del campo
de exterminio de Treblinka, cargo del que sería destituido por su torpeza para
el procesamiento de los cadáveres de sus víctimas (para una exposición de la
vergonzante Psiquiatría nazi, puede accederse a la traducción
del capítulo de Müller-Hill en la segunda edición de “Psychiatric Ethics” de
Bloch y Chodoff).
Tras la terminación oficial del Aktion T4, en agosto de 1941, el exterminio
de pacientes continuó en Steinhof por el procedimiento menos activo de unos
cuidados deficientes y la nutrición insuficiente. Morirían de esta manera más
de 3500 personas. En total, en los años del nazismo murieron más de 7500
pacientes del hospital.
En 2002 se enterraron en una tumba honoraria del cementerio central de
Viena restos histológicos de los niños. En 2012 se enterraron nuevos restos.
Hoy en día el hospital lleva el nombre del arquitecto que lo diseñó, Otto
Wagner, que no solo elaboró un conjunto de edificios funcional (y muy elogiado )
para sustituir a la “Torre de los locos” (Narrenturm)
existente hasta entonces en el centro de Viena, sino que lo complementó, para
uso del propio hospital, con la iglesia de San Leopoldo (1903-1907), una joya
del arte modernista en la que participaron también otros artistas de la época,
como Koloman Moser (que realizó las vidrieras) el escultor Othmar Schimkowitz.
El Pabellón V del actual OttoWagner aloja una exposición en recuerdo de los
tenebrosos años del nazismo y en homenaje a sus víctimas en el hospital. La
exposición puede recorrerse en una detallada página web disponible en alemán y en inglés.
Juan Medrano
Bilbao.
Optimistas a
pesar de todo o.....
Fernando Orozco
El optimismo siempre ha sido un valor en alza con lo que al pesimismo
respecta, máxime si tenemos en cuenta la asociación negativa de este último con
enfermedades tales como la depresión.
Interesantes estos artículos de Sharot T et al., que abordan el tema del
optimismo desde una perspectiva
científica y en los que se recoge el hecho de que ponemos al día nuestras
creencias en base a la mejor información que recibimos, aunque esa información
no esté contrastada . O dicho a la inversa: huimos de las malas noticias para actualizar nuestras creencias. Al parecer
esto se debe a un fallo en nuestro cerebro para codificar los errores que
deberían reducir el optimismo. Según los autores (1), las
regiones del cortex prefrontal (girus
prefrontal inferior derecho), encargadas de rastrear la estimación de error
cuando los individuos se encuentran ante una información positiva de
actualización de creencias (que pueden puntuar alto o bajo en el rasgo de
optimismo), los más optimistas realizan un rastreo de estimación de error para
la puesta al día de creencias más reducido que los individuos menos optimistas
o, lo que es lo mismo, que el optimismo está ligado a un fallo en la puesta al
día selectiva y a una codificación neural disminuida de la información
indeseable con vistas al futuro.
La investigación sobre el sesgo del optimismo sugiere una divergencia
importante de los enfoques clásicos de entender la mente y el comportamiento(2),
con la posibilidad de que la mente haya evolucionado mecanismos de aprendizaje
para predecir errores de comportamientos futuros.
El papel de los sistemas neuromoduladores en la generación de creencias
sesgadas en cuanto al optimismo(3), el empleo de drogas que estimulan la
función dopaminérgica aumentan el sesgo de optimismo. La acción de la L-DOPA altera
la capacidad de puesta al día de la creencia en respuesta a información
indeseable sobre el futuro, es decir,
reduce las expectativas negativas cuando miramos al futuro.
Los autores(4), nos dicen como los humanos formamos creencias
asimétricamente, tendemos a discutir las noticias malas y abrazamos las buenas
y de cómo este impacto reducido de la información desfavorable sobre la
actualización de las creencias puede tener importantes implicaciones sociales,
incluyendo la generación de burbujas de mercado financieras, la preparación
para enfermos frente a los desastres naturales y la toma de decisiones médicas
demasiado agresivas. Usando la
estimulación magnética transcraneal
(eliminando de esta manera el arraigado efecto "buenas
noticias/malas noticias"), se ha mejorado selectivamente la tendencia en
la gente a incorporar las malas noticias a sus creencias mediante la
interrupción del girus frontal inferior izquierdo (no el derecho).
Paradójicamente, estos resultados proporcionan un ejemplo de cómo la
interrupción selectiva de la función en una región cerebral humana, aumenta la
capacidad para incorporar información desfavorable en las creencias
vulnerables.
En este otro(5), muestras como el sesgo de puesta al día es mayor en los
ancianos sanos. La unión de este sesgo con el volumen relativo del ACC (cortex
cingulado anterior), sugiere un mecanismo compartido con un sesgo de
positividad relacionado con la edad. Los adultos mayores con frecuencia tienden
a tomar decisiones importantes en relación a cuestiones financieras, de salud y
personales. Las implicaciones de
comportamiento son más amplias en
estos contextos, debido a que un sesgo de puesta al día optimista
aumentado puede sesgar la toma de decisiones en el mundo real.
Por último en este artículo Moutsiana C et al(6) plantean la capacidad para aprender de las
malas noticias durante el desarrollo. Los humanos muestran una tendencia
natural a discutir las malas noticias mientras incorporan las buenas noticias
en sus creencias (El "efecto buenas noticias/malas noticias"), un
efecto que puede ayudar a explicar la toma de riesgos aparentemente irracional.
Comprender como este sesgo se desarrolla con la edad es importante debido a que
los adolescentes son propensos a involucrarse en comportamientos de riesgo,
así, educarles sobre el peligro es crucial. Revelamos una sorprendente
asimetría valencia-dependiente en como la actualización de la creencia se
desarrolla con la edad. Las edades analizadas (9-26 años) y más jóvenes estaban
asociadas a una puesta al día inexacta de las creencias en respuesta a
información indeseable con respecto a la vulnerabilidad. Por el contrario, la
capacidad de actualización exacta de las creencias en respuesta a información
deseable permanece relativamente estable con la edad. Esta asimetría estaba
mediada por un uso computacional adecuado de estimación de errores positivo, no
negativo, para alterar las creencias. Estos resultados son importantes para
comprender como la formación de creencias desarrolla y puede ayudar a explicar
por qué los adolescentes no responden adecuadamente a las advertencias.
1-
Sharot, T., C. W. Korn and R. J. Dolan (2011).
"How unrealistic optimism is maintained in the face of reality." Nat
Neurosci 14(11): 1475-1479.
2-
Sharot, T. (2011). "The optimism bias." Curr
Biol 21(23): R941-945.
3-
Sharot, T., M. Guitart-Masip, C. W. Korn, R. Chowdhury
and R. J. Dolan (2012). "How dopamine enhances an optimism bias in
humans." Curr Biol 22(16):
1477-1481.
4-
Sharot, T., R. Kanai, D. Marston, C. W. Korn, G. Rees
and R. J. Dolan (2012). "Selectively altering belief formation in the
human brain." Proc Natl Acad Sci U S A 109(42): 17058-17062.
5-
Chowdhury, R., T. Sharot, T. Wolfe, E. Düzel and R. J.
Dolan (2013). "Optimistic update bias increases in older age." Psychol
Med: 1-10.
6-
Moutsiana, C., N. Garrett, R. C. Clarke, R. B. Lotto,
S. J. Blakemore and T. Sharot (2013). "Human development of the ability to
learn from bad news." Proc Natl Acad Sci U S A 110(41): 16396-16401.
Fernando Orozco
Zaragoza.
Vídeo
recomendado.- El autismo en el foco de
atención.
Temple Grandin tiene en EEUU el aura de una super-star. He aquí una persona
diagnosticada de autismo capaz de explicarnos el mundo del autista a los seres
humanos “normales”. Su web: http://www.templegrandin.com/
y sus libros”Different… not less” y “The way I see it”, entre otros, son
éxitos de ventas. Imparte clases en la Universidad de Colorado y según ella
misma refiere, se solicitan sus servicios para el diseño de mataderos y granjas
de animales, debido a su capacidad de comprender la manera de pensar de los rumiantes.
Lo cierto es que el autismo parece incrementarse, (se apela a la mayor edad
de los padres como causa de ello), y ello supone un esfuerzo para educar a
estos niños y, sobre todo, entenderlos.
La Redacción.-